11 de marzo, Día Mundial de la Fontanería. El fontanero profesional, clave en la salud de los ciudadanos.
El 11 de marzo se celebra el Día Mundial de la Fontanería por iniciativa del World Plumbing Council, organización internacional que en España está representada por Conaif. El objetivo es sensibilizar a la sociedad sobre el papel fundamental que la fontanería desempeña hoy en día en la protección de la salud pública, el cuidado del medio ambiente y del planeta.
En su revista de Enero-Febrero de 2014, Conaif denuncia la situación de la fontanería en España y la grave situación que atraviesan las empresas españolas de fontanería, cuya actividad no tiene regulación en España salvo algunas excepciones a nivel autonómico. Se facilita por lo tanto el intrusismo profesional debido a como se ha aplicado en España la Directiva de Servicios, que bajo la motivación de la simplificación administrativa, ha supuesto una desregulación general de la actividad de la fontanería.
Hasta hace poco se exigía para poder ejercer la actividad el carnet de instalador de fontanería y la inscripción de la empresa instaladora en un registro público oficial. Ambas obligaciones han desaparecido de la mayor parte de la geografía española.
La figura del fontanero profesional es clave en la salud de los ciudadanos. Valga el ejemplo del caso de Hiendalaencina (Guadalajara) donde por error se contaminó la red de abastecimiento de agua potable con un vertido de gasóleo de calefacción. Es por tanto necesario contar con profesionales formados y habilitados para asegurar una praxis correcta de la profesión. Leemos en la revista como Martín Agenjo, ponente de la Comisión de Agua de Conaif, se pregunta para qué sirve tener el Código Técnico de la Edificación más flamante de Europa si no tenemos instaladores que lo pongan en práctica.
